Un día como el 10 de mayo de 1916, fue proclamada la Virgen de la Caridad del Cobre, Patrona de Cuba por el Papa Benedicto XV.
A ella nos encomendamos y ponemos en su corazón de madre, el dolor y la esperanza, especialmente a las víctimas y familiares con ocasión del lamentable siniestro del Hotel Saratoga, así como las fatigas de los pobres, el esfuerzo de aquellos que viven sirviendo y amando al prójimo, el proceso sinodal que vive nuestra Iglesia, la fe de los sencillos, las vocaciones sacerdotales y religiosas, el amor de los esposos, la unión y felicidad de las familias cubanas.
10 de mayo de 2022
(Tomado de Palabra Nueva)